Mantener una tortuga de agua en una casa requiere de una serie de pasos a seguir para que el reptil pueda tener una vida plena y saludable. Alimentación, limpieza y cuidado del ambiente son aspectos fundamentales. A continuación, se describen estos pasos de manera más detallada.
Alimentación
La alimentación de las tortugas de agua debe estar compuesta, en un 85%, por vegetales y, en un 15%, por carne. Los vegetales deben estar picados en trozos pequeños para facilitar su digestión. La carne, por otro lado, puede estar en forma de lomos de pescado, camarones, larvas de mosquito, gusanos de sangre, etc. Es importante que la carne esté cocida o hervida para evitar que la tortuga se enferme. Se debe ofrecer la comida a la tortuga en el agua, ya que así se sentirá más segura y podrá comer con mayor facilidad. Es recomendable que la cantidad de comida sea la que pueda consumir en unos 20 minutos. Los excedentes deben ser retirados para evitar que se deterioren y contaminen el agua. También es importante ofrecer a la tortuga una buena cantidad de calcio, ya que este mineral le ayudará a mantener un esqueleto fuerte y saludable. Se puede conseguir añadiendo un poco de polvo de calcio a la comida o bien ofreciendo a la tortuga unos cuantos trozos de cáscara de huevo cocido.
Limpieza y cuidado del ambiente
El ambiente en el que se encuentra la tortuga debe estar limpio para evitar que se enferme. Por ello, se recomienda cambiar el agua del recipiente en el que se encuentra al menos una vez a la semana. El agua debe estar templada, ya que las tortugas son animales frígidos y no toleran bien las temperaturas bajas. Para limpiar el ambiente, se puede utilizar una esponja suave y un poco de jabón neutro. Es importante no utilizar productos químicos ya que estos podrían ser dañinos para la tortuga. Una vez que se haya terminado de limpiar, se debe asegurar de que el ambiente esté bien ventilado para que se seque correctamente. Otro aspecto importante es el de la luz. Las tortugas de agua necesitan una buena cantidad de luz solar para mantener una correcta metabolismo. Por ello, se recomienda mantener el recipiente en el que se encuentra la tortuga en un lugar en el que pueda recibir una buena dosis de luz solar. Sin embargo, es importante no exponerla directamente al sol, ya que esto podría dañar su piel.
En general, el mantenimiento de una tortuga de agua es relativamente sencillo. Con unos cuidados básicos, podemos asegurarnos de que nuestro reptil esté sano y feliz.
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