Las pastillas Frontline para perros sirven para tratar y prevenir las infestaciones por pulgas y garrapatas. También ayudan a controlar la dermatitis alérgica por picaduras de pulgas (DAPP).
Frontline para perros es una marca de fármaco antiparasitario que se vende en forma de spot-on, que es una solución líquida que se aplica en la piel del perro. También se vende en forma de cápsulas, que se colocan debajo de la lengua del perro. Estas cápsulas se disuelven y liberan el fármaco en el torrente sanguíneo del perro, donde puede actuar contra las pulgas y garrapatas.
Frontline para perros contiene el ingrediente activo fipronil, que es un insecticida y acaricida. Fipronil se une a las neuronas de los insectos y acaros y causa la muerte de estos parásitos. También tiene acción repelente, lo que significa que ayuda a prevenir la infestación por pulgas y garrapatas.
Las pastillas Frontline para perros se administran por vía oral, es decir, se colocan debajo de la lengua del perro. La dosis se basa en el peso del perro y se debe administrar una vez al mes. Si el perro está infestado con pulgas o garrapatas, es posible que se necesite un tratamiento más frecuente hasta que los parásitos hayan desaparecido.
Frontline para perros se absorbe rápidamente a través de la mucosa bucal y entra en el torrente sanguíneo. El fármaco se distribuye por todo el cuerpo del perro y actúa contra las pulgas y garrapatas que puedan estar presentes. También tiene una acción repelente, lo que significa que ayuda a prevenir la infestación por pulgas y garrapatas.
Frontline para perros es eficaz en un plazo de 24 horas después de su administración. La eficacia dura un mes, por lo que se recomienda administrar una dosis al mes. Si el perro está infestado con pulgas o garrapatas, es posible que se necesite un tratamiento más frecuente hasta que los parásitos hayan desaparecido.
Los efectos adversos más comunes de las pastillas Frontline para perros son vómitos y diarrea. Otros efectos adversos pueden incluir nerviosismo, temblores, convulsiones, pérdida del apetito, letargo y cambios en el comportamiento. Si observa cualquiera de estos efectos adversos, debe ponerse en contacto con su veterinario de inmediato.
Frontline para perros es un fármaco seguro y eficaz para la mayoría de los perros, pero puede haber algunos efectos adversos. Si observa cualquiera de los efectos adversos mencionados, debe ponerse en contacto con su veterinario de inmediato.
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